... y lo peor de todo es que otra vez hoy he soñado contigo. Me obsesiona la idea de saber que ya no se como eres, que ya no te puedo reconocer a distancia, me obsesiona pensar que me pueda cruzar contigo un día, sobretodo desde que me dijeron que te has cortado el pelo, me invade la curiosidad y el miedo...
Hoy soñé contigo... otra vez, esta vez el sueño me desconcertaba, las demás veces en mis sueños estaba receptiva hacia ti, algo dolida pero receptiva, esta vez era diferente:
"estaba dando vueltas por Onzonilla, parecía que estaba perdida en el polígono industrial, todo el rato en la misma recta... cada vez que llegaba a la salida la volvia a tomar mal y tenia que dar la vuelta... una, dos, tres veces... coches en el carril que no era... sus luces me cegaban, unas veces parecia de noceh y otras de dia... hasta que me deslumbraron las luces de una moto... el casco del motorista era de color azul... al pasar... eras tú.
Pare el vehículo en el que iba, que ya no se ni cual era, y tu también paraste... porque te había dicho "hasta luego". Te bajaste de la moto, y entonces lo vi, tenias el pelo corto... no podía dejar de mirarte, no podía creérmelo. Entonces empezaste a explicarme uno que casi te había atropellado, y que no te había dado tiempo ha pasar por no se que semáforo porque otro se paro o no se que contabas... con esa minuciosidad con la que solías contar las cosas, calculando a la milésima de segundo las cosas...
Yo sólo te miraba, hasta que me salió un: "qué te has hecho" y entonces te toque el pelo... lo tenias cortado muy extraño, se te rizaban las puntas... entonces... avanzabas hacia mi... y te dije: "qué haces"... "quiero abrazarte" dijiste, y yo: "no, no, no, vete"... hasta que al final me acabaste abrazando... sentía miedo y tranquilidad al mismo tiempo... "
ahí me desperté... jodida, tremendamente jodida... no te quiero ver, pero tengo curiosidad por verte.
Hoy soñé contigo... otra vez, esta vez el sueño me desconcertaba, las demás veces en mis sueños estaba receptiva hacia ti, algo dolida pero receptiva, esta vez era diferente:
"estaba dando vueltas por Onzonilla, parecía que estaba perdida en el polígono industrial, todo el rato en la misma recta... cada vez que llegaba a la salida la volvia a tomar mal y tenia que dar la vuelta... una, dos, tres veces... coches en el carril que no era... sus luces me cegaban, unas veces parecia de noceh y otras de dia... hasta que me deslumbraron las luces de una moto... el casco del motorista era de color azul... al pasar... eras tú.
Pare el vehículo en el que iba, que ya no se ni cual era, y tu también paraste... porque te había dicho "hasta luego". Te bajaste de la moto, y entonces lo vi, tenias el pelo corto... no podía dejar de mirarte, no podía creérmelo. Entonces empezaste a explicarme uno que casi te había atropellado, y que no te había dado tiempo ha pasar por no se que semáforo porque otro se paro o no se que contabas... con esa minuciosidad con la que solías contar las cosas, calculando a la milésima de segundo las cosas...
Yo sólo te miraba, hasta que me salió un: "qué te has hecho" y entonces te toque el pelo... lo tenias cortado muy extraño, se te rizaban las puntas... entonces... avanzabas hacia mi... y te dije: "qué haces"... "quiero abrazarte" dijiste, y yo: "no, no, no, vete"... hasta que al final me acabaste abrazando... sentía miedo y tranquilidad al mismo tiempo... "
ahí me desperté... jodida, tremendamente jodida... no te quiero ver, pero tengo curiosidad por verte.
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